En este devocional del viernes 20 de junio, continuamos meditando en Mateo 19:16–30. El Señor enseña que así como es imposible que un camello pase por el ojo de una aguja, también es imposible alcanzar la salvación por medios o méritos humanos. Jesús desmantela la idea común entre los judíos de que la riqueza garantizaba el favor divino. Reflexionamos también sobre falsas interpretaciones de esta metáfora, y entendemos que seguir a Cristo implica renuncia, fe genuina y obediencia, no simple conocimiento intelectual. El Señor promete recompensa en esta vida y en la venidera, incluyendo bendiciones… y persecuciones. Porque Él no se queda con nada: paga bien, en su tiempo y a su manera. ¿Estamos dispuestos a dejarlo todo por seguirlo?

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