T01 - E05 Una comunidad de vida consagrada, Espera y Nacimiento

08/04/2024 8 min Temporada 1 Episodio 5
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Síntesis del Episodio

Una comunidad de vida consagradaLa Comunidad San Juan fue fundada por Adrienne von Speyr y Hans Urs von Balthasar en 1945 como un instituto secular internacional formado por tres ramas (mujeres, varones y sacerdotes diocesanos), aprobado por la Santa Sede en 2000. Desde su misma fundación ella se sintió llamada a entrar en la tradición eclesial de la vida consagrada, que nace en la cruz y fluye sin cesar en el tiempo de la Iglesia. En la cruz, el Hijo en el Espíritu Santo cumple la Nueva Alianza. Antes de que todo sea cumplido, Él une a su Madre y a su discípulo amado Juan, les dona vivir juntos Su propia forma de vida pobre, casta y obediente y los deja como célula virginal consagrada en el corazón de su Iglesia naciente. El Padre que está en el cielo corona esta Alianza con su bendición eterna.Ancilla DominiDel capítulo «Espera y Nacimiento»1.El sí total de la Virgen fue el vientre espiritual del Niño, solo entonces el cuerpo de la Madre se transformó también en vientre portador. Desde el momento en que el ángel le ha hablado, la espera de María cambia. Ella pasa de la espera propia del Antiguo Testamento a la del Nuevo. Antes, ella aguardaba expectante la plenitud prometida; a partir de ahora, lo que espera, la promesa, ya está en ella como cumplimiento.2.Cuando ella pronunció su sí, representaba a la humanidad frente a Dios. Ella dio su consentimiento para la redención, convirtiéndose en una de sus precondiciones, como el consentimiento de una madre normal y de su seno es la condición para la concepción de un niño. La alianza que Dios había establecido una vez con la humanidad en Abraham y Moisés se cumple en la encarnación del Hijo; y el sí de la Madre cumple la última condición previa para que se haga realidad. La criatura prepara y da espacio para la venida de Dios. Pero María, al hacerlo, al prepararse para ser el vaso de la encarnación, cumple el designio decidido y predeterminado en el Hijo: transformarla en su Madre. Su acción no es algo negativo, un mero ceder espacio, en verdad María acoge en la fe la fecundidad infinita que Dios ha reservado para ella cuando decidió la encarnación de la gracia en el Hijo. El advenimiento de la gracia significa que la libertad y la dependencia del hombre frente a Dios de ahora en adelante ya no están regidas por la ley, sino que son asumidas en la fecundidad activa de la misma redención. […]3.Su amor por el Niño crece con el Niño mismo. Y no solo va creciendo su amor humano y materno, sino también el amor del Señor en ella, que la va haciendo siempre más capaz de amar y así hace crecer también su mérito en la vida del Hijo, porque la semilla y el núcleo de todo mérito cristiano radica en el amor. […]–––––––––––––––-El episodio ha sido transmitido en el marco del programa «Vida consagrada» de Radio María España el 22.12.22.Descargue el libro Ancilla DominiMás textos en balthasarspeyr.org/es/publicaciones