Huele a patata podrida.
"Las heridas escondidas, los traumas, la falta de perdón, y los pecados son como las patatas podridas que cargamos en una mochila.”
Uno de los mayores problemas para poder construir una familia saludable es la falta de perdón que cargamos en nuestras vidas. El perdón no es una cuestión de fe, es una cuestión de obediencia. Dios tiene planeado para nosotros lo mejor, bendiciones, lugares de privilegio, restauración familiar, sanidad y vida eterna, pero él requiere que perdonemos, tu corazón debe estar libre del resentimiento, y Dios está contigo para ayudarte.

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