NOVIEMBRE 2Jeremías 31:31-32“He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá; no como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto, porque ellos invalidaron mi pacto.” (Reina-Valera 1960)Un nuevo pactoDios hizo algo asombroso casi mil quinientos años antes del nacimiento de Jesús. Liberó a su pueblo de la esclavitud en Egipto y los llevó a su nueva tierra. En el camino, los hizo detenerse en un monte llamado Sinaí para hacer un pacto con ellos. En aquel tiempo, un pacto era parecido a lo que hoy llamaríamos un contrato.El pacto que Dios hizo con su pueblo era bilateral: ambas partes tenían responsabilidades. Dios les dijo: “Si obedecen mi ley, los protegeré y los bendeciré en su nueva tierra”. El pueblo respondió: “Haremos todo lo que tú digas”.A diferencia de los contratos modernos —que se sellan con firmas—, aquel antiguo pacto se selló con sangre de sacrificios de animales. Pero al igual que los contratos actuales, un pacto solo es tan válido como las personas que lo cumplen. A lo largo de los siglos, Dios mantuvo su promesa perfectamente, mientras que el pueblo hizo del romper el pacto su forma de vida.¿Puedes identificarte con eso? Piensa en las promesas que has hecho a Dios y a otras personas, y luego recuerda todas las veces que las has roto. Tú te conoces bien.Pero Dios también te conoce. Por eso prometió hacer un nuevo pacto. Este pacto no es solo para el pueblo del Antiguo Testamento, sino para todas las personas de todos los tiempos, incluido tú.Este pacto no te manda a hacer nada; en cambio, trata de lo que Dios ha hecho para perdonarte. A diferencia del antiguo pacto, este nuevo pacto es unilateral. No depende de tu obediencia, sino completamente del amor salvador de Dios.Y este pacto también fue sellado con sangre. Casi mil quinientos años después de que el antiguo pacto fuera establecido, el Hijo de Dios fue crucificado en un monte llamado Calvario. La sangre que derramó en la cruz selló el nuevo pacto y te liberó de la esclavitud del pecado.Oración"Señor Jesucristo, gracias por el nuevo pacto de gracia sellado con tu sangre. No confío en mis obras, sino en tu perfecta obediencia y sacrificio por mí.  Enséñame a vivir cada día en tu perdón y en tu paz.  Amén.""Te invitamos a estudiar con Academia Cristo, Visítanos en academiacristo.com. Para empezar tus estudios de manera 100% gratis."

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